La dispersión diaria a la que estamos sometidos hacer que no nos demos cuenta de la cantidad tan enormes de las distracciones que tenemos y como afectan a nuestra alta productividad diaria. De hecho hay pequeños detalles que nos quitan energía y no nos dejan que podemos ofrecer a nuestro trabajo el 100% de la productividad que podríamos aportar.
De hecho poder tener una buena productividad implica también una buena «salud mental y emocional», y eso es importante tenerlo muy en cuenta para conseguir tus máximos objetivos.
Hábitos que nos pueden aportar alta productividad en el día a día
1.- Organízate con unos de tus peores enemigos contra la productividad, el email. El email has de consultarlo 2 o 3 veces al día de forma organizada y además, si puedes, has de hacerlo durante un tiempo limitado y controlado, si no corres el riesgo de estar constantemente perdiendo el tiempo mirando uno por uno los mensajes que te llegan. Organízate para poder contestar los que requieran de esa contestación y focaliza tu tiempo en esos que son productivos, que te generan ROI.
2.- Utiliza el teléfono para hablar con las personas cuando es importante, no permitas que se produzcan aquellas conversaciones con tu equipo que se convierten en largos intercambio de emails. Levanta el teléfono y soluciona lo que sea importante, eso hará que la productividad se focalice hacía los puntos más importantes y si puedes instaura esta forma de trabajar. Si son cuestiones de un email de ida y de vuelta no hay problema, que todo fluya está bien, pero si empiezan las conversaciones solucionarlas es lo más productivo.
3.- Organiza tus objetivos y tareas diariamente, es importante que te focalices en aquello en lo que necesitas productividad, muchas personas empiezan el día en función de lo que se encuentran en su email, es más importante que antes de abrir el email sepas que es lo que tienes que hacerlo para focalizarte en ello.
4.- Ten siempre tus objetivos presente, es importante que aunque te organices y definas tus tareas que a su vez surgen de tus objetivos, estos han de estar presentes siempre en tu hoja de ruta o en tu agenda, de forma que siempre tengas claro porque haces las cosas y que tu productividad ha de estar asociada a la consecución de esos objetivos.
5.- Trabaja en intervalos de una hora o de una hora y media, es importante que tomes pequeños descansos para volver después a estar muy concentrado en tus objetivos y con tu propia productividad al 100%, por eso es importante que oxigenes tu cerebro al menos cada hora o como mucho cada hora y media.
6.- Elimina la multitarea, parece que hacer varias cosas a la vez ofrece alta productividad, pero nunca más lejos de la realidad haz una cosas sólo y concéntrate en ella hasta que la termines o hasta que puedas dejarla organizada para seguir en otro momento, pero la multitarea no la hagas ni la consientas, la dispersión es uno de los grandes errores profesionales y siempre va en contra de la productividad.
7.- Conviértete en un extremista en la eliminación de las distracciones ya que conseguirás mayor productividad, e inculca lo mismo a las personas de tu equipo, que no te molesten para cosas que no te permitan avanzar y conseguir tus objetivos, ni a través de teléfono ni email, se radical en este principio para poder conseguir la mayor productividad.
Es importante orientar tu productividad de la forma correcta, si no el día a día hace que las distracciones y las pérdidas de tiempo sean un problema cada día mayor y en el que si tu no tomas cartas en el asunto y te respetas a ti mismo para conseguir la mayor productividad el resto tampoco lo harán, así que apuesta por la productividad para que los demás sumen hacía ti.