Pero después de tantos años y de hacer intentar hacer las cosas constantemente bien, aunque no te salgan, veo que la gente se empeña en hacerlas mal también, y mira que es difícil hacerlas mal eh! Pero es que parece que dan un premio.
Si no hay estrategia en las empresas, en los negocios o en los emprendimientos hoy en día, ese negocio tiene un problema, y es así de claro, en la época que nos ha tocado vivir, la estrategia en mayor o menor medida se convierte en una de las fórmulas del No Fracaso, no vamos a decir del éxito, porque no es siempre así, pero si no existe la estrategia es un fracaso en la gran mayoría de los casos.
La estrategia es fundamental. Cuando se empieza un camino de negocios es normal que la gente quiera experimentar para saber que pasa, y eso está muy bien cuando tienes 25 años y estás empezando en el mundo de los negocios, pero cuando tienes ya unos cuantos y como en el caso de muchos actualmente saltan a los 40 y tantos desde puestos que bastantes años dentro de empresas grandes pues la verdad es que ponerse a experimentar es algo así como absurdo.
Hay que trabajar con las ideas claras y con una seriedad de negocio (que no implica estar todo el día serio, todo lo contrario, si el negocio es serio, es posible que tengas una buena sonrisa dibujada en la cara a menudo).
La estrategia es fundamental, es algo que muchos de los que empiezan con un nuevo negocio ni se paran a pensar, pero ni siquiera se paran a hacer una planificación de nada y eso que yo no soy de los que planifican demasiado, aunque si me gusta tener las cosas bien definidas desde el primer momento, pero sin esa mínima estrategia se convierte todo en improvisación constante y esa improvisación no tiene porque estar alineada, de hecho no lo está en muchas de las ocasiones con los objetivos de la empresa.
La estrategia es fundamental. En que se diferencia un negocio con estrategia de un negocio que no tiene estrategia, pues resumiendo y sin entrar en detalles, que pueden ser miles, un negocio con estrategia (y no digo con una buena estrategia, sencillamente con estrategia) es como escuchar un concierto de una orquesta y ver que van todos acompasados y siguiendo al director de la orquesta.
Un negocio sin estrategia es como ver esa misma orquesta en la que cada cual dentro de la orquesta hace lo que cree que el director está indicando, pero nadie tiene un parámetro claro de lo que significa cada movimiento de la barita del director, por lo que como te puedes imaginar la cosa es un auténtico desastre.