Si hay una trampa en la que los emprendedores suelen caer, esa es la trampa de la dispersión y mucho más si, como pasa hoy en día, los negocios tienen algún ámbito de tecnología, ya que a las aplicaciones, los sistemas y demás, puedes dedicarle todo el tiempo del mundo y sólo conocerlo un poco más después de haberle dedicado horas y horas.

Dispersión, la Trampa

Pero lo peor son los que se dejan atrapar por la dispersión con montones de negocios, pensando que el tiempo es fácil de adaptar a si mismo, y que con un poco de tiempo de dedicación a cada negocio podrás sacar el negocio adelante.

Grave error, la realidad es que el tiempo lo puedes adaptar a ti si estás en plenas facultades físicas y mentales y con la energía lo suficientemente alta como para abordar cualquier cosa, lamentablemente somos humanos y los humanos no tenemos pilas alcalinas duracell que ponernos, si podemos cuidarnos, hacer ejercicio, tomar alimentación saludable y demás.

Pero la realidad es que nuestras energías se las pueden llevar muchas cosas por delante, una reunión de amigos en la que a uno no le va bien y afecta a los demás, un golpe con el coche que no te esperabas, y aunque puedas haber salido ileso, ahora pierde el tiempo en talleres y demás, etc, son múltiples las cosas que te pueden hacer que ese tiempo se esfume y que están en tu circulo de preocupación, es decir, en el circulo que no puedes controlar.

Evitar la dispersión

Por eso es importante que evites la dispersión en el tema de los negocios focalices todo tu esfuerzo en un tipo de negocio que te permita pensar y dedicar las 24 horas del día (si puedes) a él, o si no, el tiempo que puedas dedicarle pero dedicado de una forma concentrada.

Al inicio es como cuando tienes una bicicleta metida en barro y que las ruedas resbalan.

Por mucho que le des a los pedales será difícil conseguir que la bici salga del barro, pero si te paras a pensar y a dedicarle algo de tiempo, te das cuenta que si pones una piedra en la base de las ruedas a lo mejor se pueden agarrar y salir, y efectivamente cuando lo haces funciona, pero a lo mejor el barro es mucho más extenso que un simple charco y vuelves a caer en el mismo problema, en fin y siempre es un suma y sigue hasta que consigues llegar a tierra más o menos firme y de pronto la bicicleta empieza a correr, y todo el esfuerzo previamente dedicado tiene su recompensa.

Dispersión y apoyos

Entonces es cuando te das cuenta que cuando veas a alguien en un charco, el charco de la dispersión, es más importante decirle que piense y se concentre en ver como salir que echarle una cuerda para ayudarle, su haces lo segundo le salvarás 100 metros, si haces lo primero harás que triunfe si le pone suficiente empeño.

Pero sobre todo, que no se te ocurra salir de casa con 3 o 4 bicicletas a la vez, porque si lo haces te encontrarás que por mucho que pienses y mucha técnica que tengas en sacar las bicis del barro a lo mejor el problema que tienes es que te quedas sin fuerzas, a no ser … que tengas un gran equipo contigo, a no ser que tengas un equipo que mueve cada una de las bicis y otro equipo que te dice como moverlas y donde ir a por las piedras para que las bicis salgan a tope y un sistema antibarro para bicis que sea muy eficiente, y sin dispersiones ficticias.